La democracia funciona como un sistema de gobierno que permite a los ciudadanos y a las personas diariamente involucradas en la toma de decisiones formular a su vez, su opinión, al emitir su voto para los diputados que luego legislarán según el gobierno en turno. En España, la democracia fue establecida con la aprobación de la Constitución de 1978.
La Constitución de 1978 introdujo un sistema democrático bicameral que específicamente contiene dos cámaras legislativas: el Congreso de los Diputados y el Senado. Otros poderes creados por la Constitución incluyen el poder judicial así como el Poder Ejecutivo compuesto por el presidente del Gobierno que es elegido por el parlamento. Actualmente, el Parlamento está compuesto por el Partido Popular y el Partido Socialista Obrero Español.
Libre elección y sufragio universal
En España, la Constitución permite la libre elección y el sufragio universal para todos los adultos mayores de 18 años. Esto significa que cualquier ciudadano mayor de 18 años que viva en España tiene el derecho de votar. Esto se extiende tanto a ciudadanos nacionales como a inmigrantes que hayan residido en España durante al menos diez años. El único requisito es que tengas buenas intenciones de quedarte en España de forma permanente.
En España, la Constitución también establece la igualdad de todos los españoles ante la ley y promueve la libertad y la seguridad entre la población. Además, el voto es secreto y no está sujeto a limitaciones tales como la riqueza o el estatus social. Esto significa que la democracia funciona para todos, al permitir a los ciudadanos votar cuando y como quieran.
Sistema partidista
La democracia en España funciona de acuerdo a un sistema partidista. Esto significa que los partidos políticos son responsables de promover sus propuestas y llevarlas al Congreso para su aprobación. Estos partidos se organizan alrededor de ideas políticas y principios éticos. Estos principios son los que guían la toma de decisiones de la población y se reflejan en las propuestas de los partidos.
Actualmente, los partidos más importantes en España son el Partido Popular, el Partido Socialista Obrero Español, Ciudadanos, Unidos Podemos y las fuerzas regionales. Estos partidos compiten entre ellos para obtener la mayoría de los votos y así obtener más poder en el Congreso. De esta manera, los partidos competitivos son una parte esencial del sistema democrático en España, ya que mantienen un equilibrio de poder entre todas las fuerzas partidistas.
División de poderes
Una de las principales características de la democracia en España es que hay una división de poderes entre los tres principales actor del sistema: el poder ejecutivo, el legislativo y el judicial. El poder ejecutivo está controlado por el Presidente del Gobierno que es elegido por el Parlamento. El legislativo incluye al Congreso y el Senado y su función es la de aprobar las leyes. El Poder Judicial está compuesto por el Tribunal Supremo de España, en el que se resuelven los conflictos judiciales.
Es importante tener en cuenta que Esta división de poderes es esencial para mantener un sistema democrático funcional. Esto se debe a que cada uno de los tres poderes debe estar separado para asegurar que los distintos ámbitos del gobierno no estén sujetos a un solo actor.
Conclusion
Las instituciones democráticas en España han existido desde la aprobación de la Constitución en 1978. Esto ha permitido que España se convierta en una nación con un sistema democrático establecido y respetado. Esto se debe al funcionamiento efectivo de los sistemas de elección, el libre sufragio universal y la división de poderes entre los tres poderes principales. Esto ha permitido que España se convierta en un país democrático estable y respetado por la comunidad internacional.